domingo, 20 de abril de 2008

Píldora del día después

El tribunal constitucional oficializó el fallo que prohíbe la distribución de la píldora del día después por parte del estado.
La píldora del día después o PDD esta compuesta de Levonorgestrel que actúa hasta 72 horas después de la relación sexual. El conflicto está en como funciona la píldora, o más aún, que representa la función de la píldora.
Según expertos en contra de la píldora de emergencia, en un portal con tendencias cristianas afirman que “la píldora puede bloquear la implantación en el útero de un concebido”. “La literatura científica publicada a la fecha reconoce tres posibles mecanismos de acción de la píldora del día después: inhibición de la ovulación, inhibición de la fertilización o impedimento de la implantación, lo que constituye un efecto abortivo”.
Y la contraparte afirma "Se trata de un medicamento que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha aprobado, que tiene muy pocos efectos secundarios y que es muy efectivo"."Su acción no es abortiva, ya que no surte efecto al momento que se ha iniciado la implantación del huevo en el útero".
Es aquí cuando entramos a preguntarnos ¿Y qué dice la constitución sobre el comienzo de la vida? ¿Comienza cuando se implanta el huevo en el útero? ¿Antes o después? Pero para eso no hay respuesta. Desde la constitución de 1980 cuando Jaime Guzmán dejó el tema para los intérpretes o cuando en 1999 se dejo pendiente la situación del concebido que aún no nace. Entonces, ¿En base a qué decidió el Tribunal Constitucional? Se basó en lo mismo. Se afirmó que hay una razonable duda científica sobre el eventual carácter abortivo de la píldora. ¿Es este un buen fundamento para prohibir la distribución de la píldora? Eso al parecer queda a conciencia de cada uno. Por mi parte considero que no es tan solo un pésimo argumento, creo también que se pasa a llevar toda la libertad individual de la mujer que tiene la opción de recurrir a la píldora. No basta con decir que cabe una posibilidad de que sea abortiva como para prohibirla, por que es así también, como cabe la posibilidad de que no lo sea. Por lo tanto, aquí lo único de lo que se está claro, es que se han basado de la inexistencia de pruebas para prohibir el método y se han dejado de lado todos los racionamientos que si se pueden probar, como por ejemplo, el daño psicológico que podría causarle a una mujer que a sido abusada sexualmente y tenga que dar a luz, o simplemente llevar consigo durante nueve meses a una criatura que sería producto de un acontecimiento traumático para la madre. Y si nos ponemos a pensar, ¿Que hay del derecho de aquella mujer, de poder elegir si tener a ese hijo o no? Además que esta inequidad que existe entre los quintiles de nuestra sociedad, que dejarán que una mujer con más recursos tenga la posibilidad de comprar la pastilla, pero aquella mujer que no posee recursos, no la tenga; hará que simplemente sigamos creciendo con el quintil mas bajo de nuestra sociedad. ¿Es eso a lo que se quiere llegar?
Y por último, si se van a poner a prohibir la píldora, deberían tener en cuenta, que hoy en día existen distintos métodos para abortar, y no estoy hablando de aquel en que se descuartiza al pequeño feto hasta sacarlo del útero, estoy hablando de el consumo de distintas pastillas que contienen Levonorgestrel en menor cantidad, y que si se consumen en abundancia, tendrían la misma efectividad. Incluso, hay páginas en internet que promueven y enseñan el uso de este método; entonces, ¿Estamos promoviendo el aborto con esta prohibición? Todos sabemos que de igual manera la gente que este decidida a no tener a ese hijo, no lo tendrá.

Creo que una solución, para mi punto de vista, hubiese sido el control de la distribución de la píldora, para que no sea un método de abuso para cualquier mujer que haya tenido una relación sexual y se haya arrepentido; si no que para el uso para aquellas mujeres que hayan sido abusadas. ¿Cómo? La distribución pudo haber sido en cualquier hospital público con el consentimiento de los padres y si incluso se quiere ser más riguroso, se pudo hacer un examen. Pero prohibirla, nunca va a ser una solución.

2 comentarios:

Juan Magasich Capone dijo...

Muy buena documentación en cuanto a lo científico y judicial, precisa y objetiva.

Sólo un dato. Hasta ahora, el gobierno, o más bien el Tribunal Constitucional, no la ha prohibido, sino que poclamó que el Gobierno no la puede distribuir de forma gratuita, pero se puede comprar en establecimientos privados.

Respecto a tu opinión es todo muy válido: el derecho a una mujer de vivir una vida normal después de ser abusada, lógico. Pero como insinúas al final, es MUY difícil saber si es que la relación fue con el consentimiento de la mujer o si fue un abuso, por lo que esa opción es casi nula.

Otro punto que argumentar sería que lo vieras desde un punto de vista más global, pensando en la cultura del pueblo que la permite. Al no sólo permitir, sino distribuir la píldora de forma gratuita, el gobierno está dando origen a una política de despreocupación respecto al acto sexual. Por que pensando en lo que haría una adolescente, tiene relaciones con su novio, o con quién sea, y luego va y pide una píldora. Se fomenta mucho la irresponsabilidad sexual de este modo.

En general, muy buen comentario, el mejor de tu blog diría yo.

Ignacia Valenzuela dijo...

Gracias por tu comentario Juanito.

En cuanto a que el el tribunal constitucional no la prohibió pero si prohibió la distribución por parte del estado, estoy de acuerdo; incluso especifiqué que era por parte del estado. Y un poco mas abajo comenté mi desacuerdo con que los privados como las farmacias si puedan distribuirlas.

Con respecto a lo del exámen, no sabría decirte lo fácil o difícil que puede ser, pero si se que una mujer que tiene relaciones sexuales con consentimientos o con placer, secreta un líquido que hace que el acto sexual sea mas fluído y de lo contrario se irrita. Por lo tanto ahí habría un método.

Y por último, tal como puse en el artículo, no estoy deacuerdo con que la píldora se transforme en una pastilla de abuso, por el contrario, por eso comenté sobre la distribución de la píldora con el consentimiento de los padres o lo del exámen.

De todas maneras, me parecen muy válidos tus comentarios.